lunes, 10 de agosto de 2009

Como agua entre los dedos


Tengo tantas cosas para escribir que no se por dónde empezar. Ah sep, me chupa un huevo qué tan cursis / agresivas puedan llegar a sonar, etc. Ahora bien, si se me escapa una falta de ortografía... pido disculpas. Agradezco a mi profesor de creación que me hizo comprar un cuaderno que nunca use (Hasta ahora, que lo convertí en algo virtual). Y es que desde los ocho que tengo una pieza de papel donde desagotar energias, esta vez creo que me cohibí por un tiempo...

Es gratificante que lean, un gustazo. Violeta ♥


+--------**--------+


Titilante, anaranjada, porquería cibernética...
Aún así vuelvo a clickear, tu avatar no me dice absolutamente nada, lo bordea una luz verde, pero no estás. Puteo. Me siento una idiota otra vez. No hay diferencia con mi yo de los doce años, de no ser por la invención del "Mensajero"...y vuelvo a putear. No titila. No da ocupado, no es teléfono, no me animo a subir un escalón en la innovadora escalera comunicativa... fría, obsoleta, no le llega ni a los talones a un abrazo, o a saber que te late el corazón a un ritmo frágil pero pesado.

¿Qué será lo que nos hace tan vulnerables a lo efímero?

No hay comentarios:

Publicar un comentario