viernes, 21 de diciembre de 2012

El parte de la ausencia: Episodio I

En un leve acto de inercia recurro a tu foto una vez más, casi en el proceso de degradación que lleva a mirar a un perfecto... extraño. Resulta irónica -valga la redundancia- extrañarte en todas las acepciones de la palabra. Te miro y siento que ya no te conozco, ¿será que vamos bien con el proceso? 

Ahora sí. Tu nombre. Hablando de perfección. ¡Qué perfectamente hijo de puta te han bautizado! Sos adjetivo gentilicio en plena práctica de Inglés I, El nombre de una Peluquería a una cuadra del trabajo, el rey de las palabras por default en mi predictivo, en fin. Un horror olvidarte por nombre. Y por apellido, claro. Si brilla por sí solo...

Lamentable -o afortunadamente- en persona /cuerpo a cuerpo se rompe el hechizo del autoestima-Gloria-Gaynor. El otro día te dio el sol en los ojos a eso de las siete de la tarde del peor de los ocasos de primavera y no entendí de amor propio. El día que te des cuenta que tu hermosura no depende de gel ni de los encantos ficticios de la noche, quizás te encuentre. 

Por mi lado, el oxígeno aún es gratis...
Todo lo demás me salió muy caro.  




2 comentarios:

  1. mamushka de desamor. ¿Lenguaje nuevo?

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  2. "La matrioska /matrioskas o MAMUHSKAS (ruso: Матрёшка /mʌˈtrʲoʂkə/) son unas muñecas tradicionales rusas creadas en 1890, cuya originalidad consiste en que se encuentran huecas por dentro"...

    Me interesa que explayes tu teoría, Anónimo... :)

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